Real Madrid: En un día del día, el Madrid consigue cinco

Si el Madrid no fue derrotado sin piedad esta temporada es por la aleatoriedad del fútbol. Con una mínima lógica, el Inter lo habría enviado con un número de serie escandaloso. O Valencia. O incluso Celta. Vinicius fue uno de los mejores jugadores del Real Madrid hace un mes, sí. De Courtois lo es. Lo mejor, concretamente. Y siempre es un mal negocio. No es bueno que el portero e

Fue el equipo más famoso.

El Madrid repitió demasiadas veces la pauta del partido de ayer. Las primeras partes se entregaron por cuenta de la casa, y el último cuarto de hora a toque de corneta, con el apoyo de Benzema y Virguera. No salió contra el Espanyol.

La pegada táctica de Ancelotti fue demasiado en la primera parte. Nadie sabía lo que quería hacer. Jugó la columna-pilar del Espanyol y cazó para el Madrid.

Hasta las ocasiones de aclarado que habrían puesto a Ancelotti en una situación vergonzosa. Carlo respondió en la segunda mitad. Incluso si hubiera sacado al doctor del juego, habría mejorado de la impotencia. Y mejor. Pero hay días en los que el fútbol obedece a la lógica. O a la justicia divina.

Y no hubiera habido ley para que el Espanyol no ganara un partido en el que fuera superior, más intenso, más agresivo, más ordenado, y jugara en Ral de Toms y algún otro fútbol verdaderamente jerárquico.

. Ancelotti tiene un problema. Especialmente en la fase de defensa. En cualquiera de estos días, el Madrid marcará cinco goles. Ya deberían haberlos conseguido. Dicen que cuanto antes mejor

. El entrenador tiene que ir al rincón del pensamiento y algunos de sus jugadores aumentarán su rendimiento

. La vulgaridad y sobre todo lo que se está jugando está a la vuelta de la esquina.

EL ATLÉTICO NO FUE SUFRIDO EN NADA

Las pocas veces que Atlético tomó la mano del Barça la temporada pasada, el equipo tuvo que ofrecer la mejor versión. Pero el Barça ha cambiado tanto que ni siquiera en Atlético exigió una exigencia máxima para salir lleno y satisfecho el sábado por la noche.

Al Bara no tiene que ser fusilado. Ya se está disparando. Lemar y Joao Flix lucieron con los ojos muy abiertos en la primera parte, el Atlético mantuvo el orden y el Bara todo lo demás.

De la pereza defensiva a la nada en el ataque. Koeman terminó lo grotesco porque su frustración (o inutilidad) se ofreció en vivo y en prime time en todos los hogares españoles. Patético.

RECORDANDO DEPORTES

La Pars-Roubaix fue un monumento al ciclismo y al deporte. Desafiando los límites humanos. Por adaptabilidad y amor, ¿qué haces, Gan Colbrelli? Técnicamente sí. Pero todos ganaron.

García dijo: «El ciclismo es un deporte en el que hasta el último merece un monumento».

. Amén, Jos Mara.

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